sobre nosotros
“Dos miradas, una misma pasión.”

"Soy Ángel Mareno, fotógrafo y videógrafo apasionado por capturar emociones reales. Desde mis primeras fotos descubrí que la cámara no solo retratar personas, sino momentos irrepetibles.
Me dedico a la fotografía de bodas y sesiones personales porque creo en la fuerza de las imágenes para contar historias auténticas. Cada pareja, cada mirada y cada instante tienen algo único que merece ser recordado.
Mi objetivo es que, cuando veas tus fotos o tu vídeo, revivas las mismas emociones de ese día."*
"Soy Noelia, compañeros dentro y fuera del mundo de la
fotografía.
Compartimos la pasión por capturar momentos reales, emociones
sinceras y miradas que cuentan historias.
Cada boda, cada sesión, cada proyecto lo vivimos juntos, buscando siempre reflejar la esencia de las personas que se ponen frente a nuestro objetivo.
Creemos que la fotografía y el vídeo no son solo imágenes: son recuerdos que te hacen revivir, son fragmentos de vida que merecen permanecer.
Nos une la pasión, la sensibilidad y el compromiso de dar
lo mejor de nosotros en cada trabajo.
Porque detrás de cada historia hay dos miradas… y la nuestra busca
contar la tuya con el corazón."


"Esta foto refleja una parte esencial de mí: la pasión por lo que hago. Detrás de la cámara encuentro mi lugar, ese punto donde la técnica y la emoción se cruzan para dar sentido a cada historia que cuento.
Me gusta observar, esperar el momento justo y convertirlo en una imagen que transmita lo que las palabras no pueden. Cada persona, cada pareja, cada instante tiene una energía única, y mi trabajo es capturarla con sinceridad y respeto.
Fotografiar no es solo hacer clic, es conectar con quienes tengo delante y construir recuerdos que perduren. Así vivo mi trabajo: con dedicación, ilusión y el deseo constante de mejorar cada día."
Mi compañera dentro y fuera del trabajo. Su sensibilidad, paciencia y forma de mirar aportan equilibrio y calidez a todo lo que hacemos.
Durante cada sesión, está pendiente de cada detalle: una sonrisa espontánea, una mirada cómplice, un gesto natural… Esas pequeñas cosas que hacen que una imagen tenga alma.
Su presencia es mucho más que una ayuda: es una segunda mirada que complementa la mía, una energía serena que hace que cada sesión fluya con naturalidad y cercanía.
Juntos compartimos una misma pasión: contar historias reales, desde el corazón, con imágenes que hablen por sí solas."
“Dos miradas que se cruzan para contar una sola historia.”
